"Sábado", Ian McEwan, 2005
“Y la facilidad con que podía desvanecerse del todo una existencia, sus ambiciones, sus redes familiares y de amigos, la sólida posesión...
Lo único que sí sabemos es que la capacidad que tiene el cine o la literatura o los cómics para emocionarnos son reales. Y quizás algo más: que el conocimiento nos ayuda a no ir por la vida vendidos y en manos de cualquiera; nos hace, en definitiva, Todopoderosos.