El pasado sábado 17 por fin se dieron las conjunciones astrales que debían darse y pudimos quedar con nuestros antiguos vecinos canarios (bueno, faltaba Daniel, en cama malito…). El plan era ir a la granja del Genneper Park y echar la mañana con los peques. El día no acompañó demasiado y, de hecho, creo que fue allí donde me resfrié, pero lo pasamos muy bien y, al menos, no llovió hasta que nos íbamos a ir. Aquí os dejo las fotos.
Las mamás (en unos de los pocos ratitos en los que no estábamos charla que te charla, jaja...) y los peques en nuestra pose más camperilla (y yo haciendo publicidad del Pipoos, mi tienda de referencia, jeje). Eindhoven, 17 de marzo de 2012.
Los chicos haciendo pompas de jabón. Jaime estaba eufórico con su amigo Adrián y, aunque tuvo sus momentos lloricas en plan "Adrián corre más que yo... Adrián es más alto que yo..." se lo pasó de lujo. Eindhoven, 17 de marzo de 2012.
Junto a la granja está el Pavilijoen, un sitio estupendo para que los niños jueguen sin peligros y los papás se tomen algo en la terracita del restaurante. Hay que repetir. De hecho, cada visita que venga con niños, o sin ellos, ya sabe donde vamos a echar un buen ratito al solecito... cuando lo haya, claro. Gracias, Noe, por descubrirnos sitios tan chulos!! Eindhoven, 17 de febrero de 2012.
Y aquí esta preciosidad, Lucía, el "espíritu libre" que dice su madre, disfrutando del enorme cajón de arena del Paviljoen. Eindhoven, 17 de marzo de 2012.
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