El día 30 de agosto dio para mucho más, aparte del viaje y el reencuentro. Aquí algunas fotos, las últimas, de esta agotadooooora jornada.
Homenajeando a los recién llegados y antes de que Carlos se fuera nos fuimos a comer sushi sin control al Soho. Eindhoven, 30 de agosto de 2011.
Nuestro primer invitado no se podía ir de Eindhoven sin posar a los pies de Meneer Frits Philips. Esta foto tiene pinta de convertirse en oficial para futuras visitas. Eindhoven, 30 de agosto de 2011.
La foto no es que esté repetida, hay sutiles diferencias, sobre todo en la cara de Sergio… Eindhoven, 30 de agosto de 2011.
Y en la plaza del Markt, parada indispensable para que Jaime se subiera al Carrusel. Al menos sólo cuesta 1.50 lerus. Eindhoven, 30 de agosto de 2011.
Jaime hizo su primer paseo por Einhdoven en su bicicleta. Ya de vuelta Carlos lo iba empujando cuando comenzó a notar que iba demasiado despistado conduciendo… El pobre mío se estaba quedando dormido encima de la bici!! Demasiadas emociones y muy poco sueño para un sólo día. Eindhoven, 30 de agosto de 2011.
A pesar de la gran siesta que se pegó, por la noche cayó frito ya en su nueva y enorme cama. Después de todo un mes de agosto durmiendo con la tita Merchi, con la Yaya o con Mamá, nos costó un poco de trabajo que consintiera en quedarse solo, pero lo conseguimos. Es tan bueno… Eindhoven, 30 de agosto de 2011.
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