"–Querida Marie, la desgracia siempre es vencida por la tenacidad – suele repetir ella, Christine– Antes o después, amanece, y quien se defiende con los argumentos de la bondad disipa las tinieblas hasta que su contrincante queda desarmado."
"Atiende querida (…) No podemos aspirar a caer bien a todos. Con determinados sujetos es preferible la indiferencia."
"La hermosura muda en flor seca, el hombre deriva en ceniza, pero el conocimiento es como una hoguera, todos cuantos desean coger antorchas de ella se alumbran sin que su pábilo mengüe por ceder su luz. ¡Ay, la sabiduría! Es el máximo bien que en esta tierra podemos alcanzar, por su excelencia no es comparable siquiera a la nobleza de sangre o a las riquezas."
"No tuvieron ventura con sus esposas. Las refinadas Annette y Armina resultaban antipáticas. Estaban convencidas de que la mujer no tenía derecho a pensar. Las dos cubrían con un leve flequillo su frente. Eran de mi edad pero nunca logramos entendernos. Solo me daban respuestas cortan
tes y en las pocas ocasiones en que nos vimos se apartaban de mí como si les fuese a contagiar mi entrega al estudio.
Me cansé de rogarles migajas de conversación, total, ¿para qué?, para hablar de los cotilleos, ¡qué me importa a mí lo que ocurra en casa ajena con las preocupaciones que tengo en la mía!."
"Tan solo tres dedos –el pulgar, el índice y el corazón-- son los que sostienen la pluma, si bien el cuerpo entero se fatiga, ya que todos los sentidos y facultades se concentran en expresar con austeridad o rimbombancia el fruto del estudio. Y, de esta guisa, se completa el párrafo."
"Al principio, cuando yo misma hacías las reproducciones de mis obras, por instantes deseé ser un “copista analfabeto', sujeto que por otra parte era muy cotizado en todos los monasterios pues, al dibujar replicando signos que le proponían los doctores, era un artista en la iluminación del abecedario. Ningún letrado podría competir en caligrafía con cualquiera de aquellos mecánicos del cenobio que escribían en latón sin comprender el contenido, de semejante modo al proceder del árabe que trazara un evange
liario en caracteres griegos."
"Recuerda que la rosa solo tiene espinas para el que las arranca.
Si hecho mano de la fantasía, es porque me gusta alimentar a los personajes con cucharadas de un optimismo que no logro hallar en la historia actual. Con el auxilio de este dulce jarabe crecen más sanos y robustos.
Como afirmaba Tommaso, cada biblioteca es templo de los remedios del alma, pues cura la ignorancia y apacigua casi todos los demás males."
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